9 de febrero de 2024 / Por: Redacción / Infografía: Península Taurina
Hace precisamente 77 años, el 9 de febrero de 1947, el diestro español Manuel Rodríguez "Manolete", toreaba su última corrida en territorio mexicano, hecho que ocurrió en la Plaza de Toros "Mérida" de la capital yucateca, efeméride que hoy hemos querido recordar en este espacio a través de un pequeño texto en el que presentamos algunos datos de su biografía.
Aquella tarde en el Coso de Reforma Manuel Rodríguez "Manolete" alternó con los mexicanos Fermín Rivera y Gregorio García, quienes lidiaron y estoquearon un encierro de la ganadería de Palomeque, propiedad de don Fernando y don José Antonio Palomeque.
Una bonita placa conmemorativa promovida por la Peña Taurina "Yucateca" se encuentra empotrada en el túnel de cuadrillas del coso meridano para perpetuar ese gran acontecimiento. La placa fue develada por el matador mexicano Carlos Arruza, el 11 de enero de 1959.
Manuel Rodríguez Sánchez nació el 4 de julio de 1917 en Córdoba, provincia de Andalucía, España, a las 1:30 de la madrugada en la casa 2-A de la calle Conde de Torres Cabrera. Debutó el 22 y 24 de julio de 1933, recién cumplidos los 16 años en la parte seria de dos charlotadas.
Debutó con picadores en Madrid, el 1 de mayo de 1935, en la desaparecida plaza de Tetuán de las Victorias. Alternó con los mexicanos Liborio Ruiz, y Silverio Pérez, quien se presentaba en España, además de Bonifacio Fresnillo "Valerito Chico", con astados de Esteban Hernández.
Se presentó en Córdoba, el 25 de julio de 1935, en el coso taurino de Los Tejares, compartiendo cartel con J. Pericas, E. Cepeda, en la lidia de novillos del hierro de La Cova.
Debutó en la Real Maestranza de Sevilla, el 26 de mayo de 1938, en plena guerra civil. Alternó con Torerito de Triana y Juan Belmonte Campoy, con novillos de Ramón Ortega.
Recibió la alternativa el 2 de julio de 1939, en la Real Maestranza de Sevilla, de manos de Manuel Jiménez "Chicuelo", en tanto que como testigo estuvo Rafael Vega de los Reyes "Gitanillo de Triana". El toro de la ceremonia se llamó "Comunista", del hierro de Clemente Tassara.
Confirmó en Las Ventas de Madrid, el 12 de octubre de 1939. Siendo su padrino Marcial Lalanda, ante la presencia de Juan Belmonte, con el astado "Tejón", del hierro de Antonio Pérez.
Confirmó en el Toreo de la Condesa de la Ciudad de México, el 9 de diciembre de 1945, de manos de Silverio Pérez, en tanto que como testigo estuvo Eduardo Solórzano. El toro de la ceremonia se llamó "Gitano", perteneciente a la ganadería de Torrecilla.
Estuvo en el cartel inaugural de la Plaza México el 5 de febrero de 1946, alternando con los mexicanos Luis Castro "El Soldado", Luis Procuna, con toros del hierro de San Mateo.
Toreó su última corrida en México el 9 de febrero de 1947 en la Plaza de Toro "Mérida" de la capital del estado de Yucatán. Alternó con Fermín Rivera y Gregorio García, quienes lidiaron toros de la afamada ganadería de Palomeque, propiedad de Fernando y José Antonio Palomeque.
El 28 de agosto de 1947 toreó en Linares, España, alternando con Luis Miguel Dominguín, y Rafel Vega de los Reyes "Gitanillo de Triana", con toros de Miura. Aquella tarde recibió una mortal cornada del toro "Islero", que le atravesó el muslo, destrozando el "Triángulo de Scarpa".
La herida le produjo una hemorragia incesante y el matador falleció a las 5:07 horas del día siguiente, es decir, el 29 de agosto. Las únicas e impactantes fotografías que existen de la tragedia fueron tomadas por el destacado reportero gráfico Paco Cano "Canito".
En el año de 1997, Fabián Garrido actual médico de la Plaza de Toros de Linares, donde se produjo la tragedia e hijo del galeno que operó al diestro, declaró para el Diario El País, que Manuel Rodríguez "Manolete" murió a causa de un suero que se le administró tras la cogida. La cornada no era mortal, sino similar a otras, y que su padre procedió a ligar los vasos rotos.
Manuel Rodríguiez "Manolete" presentaba un choque traumático, del que se recuperó. Pero el médico de la Plaza de Toros de Madrid, Luis Giménez Guinea, le administró un suero de plasma desecado, utilizado durante la Segunda Guerra Mundial, que tenía mala fama. El torero cordobés murió tras administrarle el primer centímetro cúbico.