14 de mayo de 2021 / Por: Redacción / Foto: Archivo
Fue el 13 de mayo de 1962, hace 59 años, cuando se presentó por última vez la ganadería de Palomeque, en la Plaza de Toros "Mérida" de la capital yucateca, efeméride que hoy hemos querido recordar en este espacio a través de este pequeño texto a manera de semblanza.
Esa tarde en el Coso de Reforma se lidiaron siete toros del legendario hierro de Palomeque, propiedad de don Fernando y José Antonio Palomeque, para el rejoneador portugués Brillaldo Matos, y a pie el portugués Manolo Dos Santos, además de los diestros mexicanos Jorge "El Ranchero" Aguilar y Benjamín López Esqueda.
La ganadería de Palomeque fue fundada en 1923, por los hermanos yucatecos don Fernando y don José Antonio Palomeque Pérez de Hermida, en el rancho Orizaba, enclavado en el municipio de Tenabo, Campeche, con 43 vacas y 3 sementales del hierro sevillano de Luis Gamero Cívico (encaste Parladé). Para su divisa escogieron los colores azul, amarillo y rojo.
Tras la muerte de sus fundadores en 1966 y 1967, la ganadería de Palomeque desaparece en 1970. Lo mejor del ganado (vacas y sementales) fue vendido a don Gastón Santos, quien había fundado su ganadería en 1966, en el municipio de Tamuín, San Luis Potosí. Lo que quedó lo compró el yucateco Fernando Palma, quien fundó su dehesa en el municipio de Tahmek, Yucatán.
El nombre de la ganadería, así como el hierro y la divisa pertenecen a la familia Palomeque. De esa manera llegó a su fin una de las ganaderías peninsulares más importantes de México.
